Una nueva e insólita imagen nos llega desde las carreteras rusas.
Los protagonistas de esta loca historia son una vaca y un toro, que en plena relación sexual, cruzan una carretera, justo en el instante en el que este conductor circulaba por ella.
El auto no tiene tiempo para frenar, provocando un accidente e interrumpiendo el momento de pasión de los animales.
Más allá de la interrupción, ni los animales ni el conductor sufrieron daños. El peor parado fue el auto, con el parabrisas totalmente destrozado por el impacto.