Tallywackers fue un restaurante de Dallas que abrió sus puertas en 2015, pero que terminó quebrando tan solo un año después de su apertura. Su idea era entregar una experiencia al revés de Hooters, la cadena norteamericana de comida rápida que se caracteriza por tener meseras en muy poca ropa.
Hooters tiene más de 300 sucursales a lo largo de Estados Unidos, y decenas más en el resto del mundo. Por ese motivo, no era extraño pensar que a un local similar, pero con hombres en poca ropa, también tendría un buen resultado.
De ese modo, Tallywackers se inauguró en mayo de 2015 y apuntó a una clientela compuesta en su mayoría de hombres homosexuales, pero rápidamente llegaron mujeres también. Pero después de que pasó la novedad, los clientes dejaron de ir.
Rodney Duke, dueño de Tallywackers, aseguró que simplemente se cambiarían de barrio, pero nunca volvió a abrir. Aparentemente, los resultados del restaurante no fueron los esperados.