Todo partió como un juego: el dueño de este particular perro de raza Corgi colocó sobre su hocico una galleta, con un resultado sorprendente.
Gracias a la tecnología de grabación denominada Slow Motion, cada movimiento que realiza esta mascota pudo ser apreciada de una forma nunca vista.
Tras unos segundo e intentos fallidos, este simpático can logra su cometido: comerse su merecida galleta.
A continuación pueden revisar este particular registro:
Foto: Reproducción - YouTube.