Pudo haber sido una selfie más del periodo de práctica de la mexicana, María José González, sin embargo se ha transformado en toda una tortura.
La joven está en el ojo del huracán por una foto viralizada en redes sociales que, según lo comentado, se la habría tomado con una enferma moribunda de fondo en un hospital de Reynosa, Tamaulipas, imagen que ha recibido el repudio generalizado.
La estudiante respondió el pasado 7 de agosto en su Facebook aclarando que la foto fue con consentimiento de la mujer, además de indicar que ella no estaba muriendo.
A pesar de sus explicaciones, la chica ahora podría perder su carrera profesional luego que la Universidad del Valle, a la cual asiste, indicara mediante un comunicado que están analizando el caso y que este "será llevado a un comité de Honor".
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