En el maravilloso mundo de los animales, un orangután hace de las suyas con la polera de uno de los visitantes de un zoológico.
No se cansó hasta que obtuvo lo que deseaba. Aunque claro que no le bastó con dejarse la prenda, luego de varios intentos y con cierta destreza pudo acomodarse esta en su cuerpo.
Situación que luego de un buen susto, termino sacando carcajadas a los visitantes del zoológico. Pese a que uno de ellos debió quedarse sin su polera.
Disfruta ahora la entretenida secuencia.