El paso de los años, el nacimiento de los hijos, las subidas y bajas de peso bruscas o la mala calidad de la piel pueden provocar que la elasticidad de la vagina se vaya perdiendo. Esto trae consigo una serie de complicaciones para las mujeres, que afectan desde lo estético hasta la vida sexual e incluso provocando incontinencia urinaria.
La tecnología actual permite que este problema pueda ser tratado sin cirugía y con un resultado óptimo. Esto a través de un láser multidisciplinario, que permite el tensado vaginal generando colágeno en la zona. “Éste es uno de los sistemas láser más avanzados del mundo, ya que provee una mayor cantidad de tratamientos, sin dolor, de forma rápida y sin necesidad de tiempo de recuperación”, destaca la Dra. Carmen Moren.
La Dra. Leila Esbir, médico encargada de la plataforma ginecológica de la Clínica Dra. Carmen Moren, agrega que “el rejuvenecimiento vaginal con láser es un procedimiento que utiliza el efecto térmico de la luz láser para contraer las fibras colágenas y reticulares de la submucosa o epitelio (mucosa vaginal), reduciendo el diámetro y la longitud vaginal, generando un efecto de tensado inmediato’’.
El procedimiento es efectuado previa evaluación médica y al usar la tecnología FotonaSmooth y su modo no invasivo, el láser actúa sin quemar ni vaporizar, sino que penetra en forma profunda y totalmente controlada dentro de los tejidos.
La tensión vaginal se produce en la medida que este láser provoca que el propio cuerpo genere mayor cantidad de colágeno, a través de la estimulación con calor controlado. “Es ideal para aquellas mujeres que han tenido parto vaginal y, como consecuencia pérdida, de elasticidad de la piel y mucosa, pues el paso del bebé por el canal vaginal estira, elonga y rompe muchas fibras que provocan su relajación, generando síndrome de amplitud vaginal. También para la incontinencia urinaria de esfuerzo en sus primeros estadios y para mejorar la sequedad vaginal y/o atrofia vaginal”, señala la Dra. Esbir.
Los excelentes resultados de este láser, que puede ser aplicado en todas las mujeres sin límite de edad, previa evaluación médica, han sido demostrados en múltiples trabajos científicos. “Son muchas las mujeres que presentan este problema, y cada vez más las que se atreven a enfrentarlo y buscar una solución a esa insatisfacción. La mejoría del aspecto externo y de la funcionalidad de la vulva y vagina, terminan por restablecer su autoestima recuperando la calidad de vida sexual, y al resolver los problemas de incontinencia urinaria de esfuerzo, mejora la calidad de vida”, afirma la Dra. Esbir.