Es el séptimo año más cálido de la historia.
2013 ha resultado ser un año caluroso, concretamente el séptimo con más calor desde que comenzaron las mediciones y registros modernos, en 1850, según datos recogidos en un informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Dicho informe se ha dado a conocer esta semana en la Cumbre de la ONU sobre el clima, celebrada en Varsovia (Polonia), y añade una fuerte preocupación por el aumento de ciclones, sobre todo en el Pacífico.
Según los datos, durante los primeros nueve meses de 2013, de enero a septiembre, las temperaturas empatan con 2003 como el séptimo más cálido en este período de la historia. La OMM detalla que la mayoría de los continentes tuvieron temperaturas superiores a la media, en total, 0,48 grados Celsiius por encima, sobre todo en Australia, en la zona septentrional de América del Norte, noreste de América del Sur, norte de África y gran parte de Eurasia, mientras que las zonas más frías se sitúan en la parte central de América del Sur, la costa oeste del océano Pacífico cerca de Ecuador, una pequeña parte de Rusia y el noreste de Asia.
La tendencia es, por tanto, el aumento de las temperaturas. “Las concentraciones atmosféricas de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero alcanzaron un nuevo récord en 2012, y se espera que alcancen los niveles sin precedentes de nuevo en 2013”, aseguró el secretario general de la OMM, Michel Jarraud, por lo que ha vaticinado "un futuro más cálido".
La organización también cita como fenómenos extremos de este año las olas de calor récord vividas en Australia, el agosto más caluroso desde que se tienen registros vivido en China o las inundaciones de Sudán y Europa, entre otras.
AUMENTO DE TIFONES EN EL PACÍFICO
Pero, además del aumento de temperaturas, la OMM alerta en su informe de una tendencia de los climas extremos , donde se aprecia un agravamiento del impacto de las tormentas, como el tifón Haiyán en Filipinas, debido al aumento en el nivel del mar.
El organismo meteorológico señala que ciclones tropicales como el que ha asolado recientemente Filipinas no pueden ser directamente atribuidos a los efectos del cambio climático, pero advierte de que "los niveles superiores del mar están haciendo ya a las poblaciones costeras más vulnerables a las tormentas" lo que origina "consecuencias trágicas" como las vividas en Filipinas.
La OMM confirma que el nivel del mar mundial alcanzó un nuevo máximo histórico, al aumentar alrededor de 3,2 milímetros por año desde 1993, por lo que se duplica la tendencia observada durante el siglo pasado, de 1,6 milímetros por año. Además, el nivel del mar seguirá aumentando debido a los cascotes de hielo y glaciares de fusión.
"Más del 90% del exceso de calor que se está generando a partir de gas de efecto invernadero es absorbido por los océanos, que por lo tanto se seguirá calentando", ha indicado Michel Jarraud.
Según el informe, la actividad ciclónica fue mayor tanto en el Pacífico Norte Oriental, donde hubo un total de 17 tormentas, ocho de los cuales tuvieron categoría de huracán y uno de ellos, “Raymond”, se convirtió en 'huracán mayor'; como en el Pacífico Norte occidental, donde se registraron 30 tormentas, incluidos 13 tifones, por encima del promedio de 1981-2010, que fue de 26 tormentas.