Muchos son los padres que optan por los portabebés o cabestrillos para transportar a sus bebés, pero ¿los utilizan de la forma correcta?
Desde la Asociación Española de Pediatría en Atención Primaria explican que es necesario que el sistema sea seguro para evitar accidentes y agregan que "independientemente del tipo de portabebés que se utilice, se deben seguir unas normas estrictas a la hora de transportar a los niños con estos arneses", reiteran.
Por ejemplo, no se debe utilizar en bebés menores de cuatro meses, en gemelos, prematuros, niños bajos en peso o con problemas en las vías respiratorias.
Los peligros
Pediatras señalan que este tipo de cabestrillos pueden causar tres tipos de sofocación en los bebés:
1-. Por compresión en la nariz y boca del lactante contra el cuerpo del adulto que lo sostiene.
2-. Si la cabeza del lactante se gira hacia delante puede provocar que la barbilla toque el pecho, obstruyendo la vía aérea y limitando el aporte de oxígeno.
3-. Si se tapa con la tela la cara del menor, el niño respira de su mismo aire, provocando una situación similar a la anterior.
Cómo usar correctamente
-La cara del niño debe permanecer siempre visible.
- Vigilar con frecuencia su postura.
- Vigilar que el niño respira libremente.
- Evitar que la cara se apoye contra el cuerpo del adulto.
- No utilizar este sistema de transporte en un vehículo.
- Utilizar siempre sistemas portabebés apropiados para el peso y la edad del bebé.
- Se debe comprobar diariamente la tela, las costuras, la presencia de pliegues y los broches o cremalleras del artilugio.