El Instituto de Recursos Mundiales (WRI) realizó un estudio en el que señala que nuestra forma carnívora de vivir, terminaría acabando con el mundo a largo plazo.
Esto debido a que, tal como analizaron, la producción de carne para los próximos 30 años crecerá en al menos 50% más, con el fin de lograr alimentar a toda la población mundial.
Este efecto provocará que los bosques que queden en el mundo desaparezcan por el efecto invernadero y nadie podría detener el calentamiento global, debido a la emisión de gases producto de los animales.
Para solucionar este problema, existen dos soluciones, según indican los expertos: Dejar de consumir tanta carne o bien dejar de reproducirse sin control.
El WRI señala que al menos dos millones de personas deberían bajar su consumo de carne, a un 40% mínimo. Aunque lo ideal sería dejar de consumirla al 100%.