Muchas personas recurren a la mezcla de lavaloza con cloro para asegurarse de que podrán eliminar toda la suciedad y bacterias de una olla, plato o superficie. Sin embargo, expertos en el área aseguran que esta mezcla sería más peligrosa que efectiva.
Diego Sierra, doctor en Ciencias de la Universidad de Valparaíso, conversó con Las Últimas Noticias sobre las prácticas que se realizan comúnmente a la hora de limpiar y los mayores errores que se comenten. Entre ellos, estaría mezclar el lavalozas con cloro: "Anulas el poder del detergente porque lo estás oxidando y también se anula el poder blanqueador del cloro. Además, se liberan compuestos que podrían ser tóxicos -las cloraminas-. Hay que respetar la formulación de fábrica y nunca intervenir los químicos que usamos", señaló el científico.
El jefe de la unidad de paciente crítico de la Clínica Indisa, Sebastián Ugarte, se sumó al diagnóstico de Sierra. "El cloro que usamos en las casas en realidad es una solución de hipoclorito de sodio disuelto en agua, es altamente tóxico y puede producir inflamación de la piel, de las mucosas respiratorias y de los ojos (...) Los lavalozas son tensoactivos, son sustancias que se unen a la grasa, disminuyen su tensión superficial y permite eliminarla, pero eso, actuando en conjunto con el hipoclorito, también hace que se vuelva inestable".
Si se quiere limpiar efectivamente, el enfoque debería estar en las esponjas. El infectólogo de la Clínica Universidad de los Andes, Javier Tinoco, aseguró que hay que cambiarlas semanalmente si es que se utilizan todos los días, y que no se ha comprobado que sirva hervirlas o desinfectarlas con cloro.
Otros errores a la hora de limpiar serían agregar agua al lavalozas para hacerlo rendir, ya que se necesitaría más cantidad para hacer espuma, que es lo que finalmente logra desengrasar.
Con información de Las Últimas Noticias.