Click acá para ir directamente al contenido

El lado oscuro del modelaje

"Lo que las modelos callan" se llama el libro donde Christine Hart cuenta de abusos y adicciones en el mundo de la belleza.

24horas.cl Tvn

Jueves 13 de diciembre de 2012

"Escribí el libro porque quería contar los que envuelve en realidad la verdadera carrera de una modelo profesional, una de carne y hueso y no la de una top model", explica la ex maniquí española Christine Hart sobre su polémico debut editorial.

Cargado de denuncias y revelaciones sobre lo que sucede tras bambalinas en la moda, "Lo que las modelos callan" es una especie de diario personal donde Hart cuenta sus vivencias en el mundo de las pasarelas.

En esas páginas describe episodios de abusos y adicciones como el desmayo de una compañera durante un casting al percatarse que dentro de su vagina tenía varios condones llenos de semen por más de 24 horas.

"Lo malo era que ella no tenía recuerdo de nada de lo que le había sucedido la noche anterior, excepto que había estado bebiendo y fumando porros (marihuana) con un fotógrafo, hasta que perdió la noción de la realidad", escribió.

Según cuenta a El País la ex modelo de origen alemán, el hecho que fuera "descubierta" cuando terminaba su carrera de Derecho a los 25 años le permitió "nadar en un mar de pirañas y tiburones".

Pese a que guarda buenos recuerdos de su paso por Milán, París y Nueva York, no olvida los problemas que podían existir con fotógrafos "endiosados" por el medio.

"Las modelos pecan de ingenuas y tienden a sentirse en inferioridad cuando trabajan con un profesional célebre. Creen estar obligadas a caerles en gracia, soñando en convertirse en su musa y así ganar algún favor o privilegio. Suelen ceder a sus fantasías, que a menudo nacen en medio de sesiones fotográficas por excitación", señaló.

Además, en su libro también critica a lo que están sometidas hoy sus colegas, lo que llama "dictadura de la belleza".

"De una talla 38 se ha pasado a una 34 y las modelos actuales no transmiten. De hecho, no llegan a calar entre el público. Ahora no sabes si las chicas son autómatas o modelos. Muchas están en los huesos y tampoco ayuda el factor que ya ninguna sonríe", agregó.

Una de las anécdotas que también la marcaron fue el hecho de desfilar para el dictador libio Muammar Gadafi. Recuerda que en teoría se dirigía a Trípoli para desfilar en la embajada española a promover la moda occidental, cuando se encontraron en otro lugar.

"Acabamos aterrizando en medio del desierto, encerradas en un búnker y saludando al mismísimo Gadafi", recordó.