Un increíble y drástico cambio fue el que tuvo un hombre que vivió una crisis matrimonial ya que, según su esposa, engordó tanto que ya no era posible tener relaciones sexuales con él.
Stephen Ringo, de 38 años, llegó a pesar más de 180 kilos y cuando su esposa lo enfrentó por lo que estaba ocurriendo, decidió comenzar a preocuparse por su peso y salud, por lo que optó por cambiar su dieta, realizar ejercicio y ponerse en forma, logrando bajar 101 kilos.
Según contó el ingeniero al Daily Mail, durante la escuela era un destacado levantador de pesas, sin embargo, una vez casado, se dejó estar y comenzó a comer mucho Mc Donalds y pizzas, por lo que engordó a tal extremo que no era capaz de ponerse calcetines.
A tal extremo llegó su obesidad, que en 2016 se separó de su esposa y Ringo se sumió en una depresión, sin embargo, pudo salir adelante de ambas enfermedades, gracias al ejercicios y las comidas saludables que consume a diario y en un intervalo de tiempo máximo de cuatro horas.
"Es justo decir que mi peso arruinó mi matrimonio. Fue el factor más importante. Mi relación con mi esposa se deterioró a medida que avanzaba mi peso. Estaba deprimido y eso quedó en una especie de intimidad. Mi peso hizo que mi vida sexual cayera al suelo", contó al medio británico.
"Mi ex esposa y yo nos fuimos de vacaciones a la ciudad de Nueva York en 2012 y mi peso realmente me pasó factura. Cuando estás en Nueva York, hay muchas caminatas involucradas. Después de un paseo por Central Park tuve que sentarme en un banco para recuperar el aliento durante media hora. Me sentí como un fracaso", confesó.