Leonardo Nunes Ricucci tiene 24 años y es el CEO de Novalact, una empresa de biotecnología que acaba de nacer y que ya cuenta con el aval de la Asociación para el Avance de la Ciencia, perteneciente al Gobierno de Estados Unidos. La institución lo seleccionó como uno de los 67 semifinalistas del concurso GIST Tech-I, competencia a la que llegaron más de 500 proyectos de ciencia y tecnología de todo el mundo.
A la etapa final pasarán 30 elegidos por votación abierta y cuyo plazo termina este miércoles 1 de octubre. "Sería una validación para el proyecto Novalact, pero también una oportunidad para conseguir que científicos extranjeros se unan como mentores y para obtener apoyo monetario de posibles inversionistas", apunta Leonardo, titulado en Ingeniería Comercial por la Universidad Del Desarrollo.
- Leonardo, ¿cómo saltaste de la Ingeniería comercial a la Biotecnología?
A través de un grupo en Internet de interesados en ciencia y tecnología conocí a los que hoy son mis dos cofundadores de Novalact, Francisco Arriaza (25) y Rodrigo Leyton (24), ambos bioquímicos de la Universidad de Chile.
Queríamos combinar el emprendimiento con la ciencia, pero la decisión de trabajar en un probiótico para la intolerancia a la lactosa surgió porque era el área de expertise de mis dos socios y porque, además, Francisco sufre este problema. A través de él hemos entendido mejor cómo se sienten nuestros potenciales usuarios y nos dio más visión sobre lo que es el dolor y la posible solución para este problema.
PROBLEMAS CON LA LACTOSA EN CHILE
La intolerancia a la lactosa es un problema que afecta al 42,2% de los niños y adolescentes de entre 10 y 18 años, según un estudio del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos, y al 25% de los adultos en Chile, según otro informe de la Universidad Católica. Esta misma institución desveló que más de la mitad de los chilenos carece de la enzima que permite digerir el azúcar de la leche (lactosa).
Los síntomas son cólicos abdominales, diarreas, gases, náuseas y distensión abdominal, y se presentan entre 30 minutos y dos horas después de comer productos lácteos. Hasta el momento, las soluciones son evitar dichos alimentos o tomar una pastilla antes de cada comida.
- ¿En qué varía su propuesta?
(La pastilla de lactasa) es lo que queremos mejorar, porque tienen una efectividad limitada de 30 minutos. Nosotros queremos desarrollar pastillas para que se consuman una vez al día y se pueda seguir con una vida normal, sin tener que preocuparte cada vez que tomes algún alimento con lactosa.
Ahora nos encontramos en la fase de desarrollo. Existen otros productos con la misma base tecnológica que han sido aprobados por diversas instituciones, lo que nos valida para creer que esto se puede conseguir.
- Tras ganar en mayo Start Up Chile, renunciaste en agosto a tu empleo para dedicarte full time a Novalact, ¿qué supuso la institución para dar el paso?
Start Up Chile nos da validez al proyecto, hay gente que ve potencial en esto. Desde un punto monetario, entrega 20 millones de pesos a través de Corfo para el crecimiento del proyecto. Por otra parte, está el tema de los contactos, aunque en este sentido para nosotros es más difícil, porque Start Up Chile se centra más en tecnología.
De todas formas ha habido un esfuerzo por contactarnos con gente de la industria y de generaciones anteriores del área de biotecnología. Nos rompió el mito del miedo al emprendimiento y el "nadie te va a querer ayudar y todos te van a querer copiar". Ha sido todo lo contrario.
- Y cómo investigadores científicos, ¿cuál es la principal barrera?
Principalmente es un tema de mentalidad. Aún gran parte de la investigación científica en Chile es tradicionalista, centrada en desarrollar ciencia básica, lo cual es bueno, pero muchas veces se pierde la oportunidad de llegar a un producto o una solución práctica. Solo se hace un paper que se publica y se guarda.
Novalact, que pretende trabajar en un futuro en otros problemas estomacales, fue también semifinalista de un concurso de la Universidad Católica, donde coincidió, curiosamente con Emilia Díez, CEO de Kaitek Labs y otra de las semifinalistas del concurso internacional GIST Tech-I. Estos dos jóvenes emprendimientos, junto con Políglota, de Juan Manuel Sánchez, son los tres representantes nacionales que ansían estar entre los 30 finalistas que asistirán al encuentro global en Marruecos.
Vea los 67 proyectos y podrás votar por los emprendimientos chilenos en este link.