La chía es 100% recomendada para incorporarla a la dieta alimenticia.
La semilla, que proviene de una planta originaria de las áreas montañosas que se extienden desde México hasta Guatemala, es considerado uno de los súper alimentos por los especialistas, quienes no dudan sugerirla en el plato diario.
"Es una semilla que se hizo conocida por su alto contenido de ácido graso omega 3. Hay pocos alimentos que tienen esta propiedad", dice María Luisa Aguirre, pediatra y nutrióloga de clínica Dávila en conversación con 24Horas.cl.
En el período de las civilizaciones precolombinas se utilizaba para la elaboración de medicamentos, eso sí, sin saber qué había detrás de este compuesto. Por estos días, médicos relacionados con la nutrición valoran su incorporación a dietas alimenticias por su aporte en el control de patologías.
"Sirve para el tratamiento de colesterol y triglicéridos altos. Se utilizan como parte de la dieta y no como un fármaco agregado. Eso sí, lo que se sabe es que el ácido graso omega 3 de la chía no reemplazan a los que aportan el pescado, que es de origen animal. Tienen una composición levemente diferente", analiza y aclara la especialista.
Los granos de chía poseen entre 19 y 23 por ciento de proteína y son una buena fuente de vitamina B, calcio, potasio, cinc y cobre.
"La chía se puede usar en forma seca, o como un gel. Por ejemplo se puede utilizar como parte del aliño, tal como el sésamo. Acompañando la ensalada es una buena indicación, así mismo sobre el yogurt", añade la nutrióloga.
El estudio de esta semilla comenzó luego de detectar que los esquimales de Groenlandia tenían baja incidencia de enfermedades cardiovasculares. Su alimentación se basaba en pescados azules, ricos en Omega 3 y se demostró que los Omega 3 ayudan a normalizar la presión arterial, reducen el colesterol y los triglicéridos.
La semilla actualmente se ha ganado un lugar en los top ten de alimentos beneficiosos para la salud, aunque advierten que se debe considerar su uso y preparación.
"La chía y los 'súper alimentos' tienen muchas buenas condiciones para apoyar a la buena salud, pero depende mucho de cómo los usamos, cómo lo acompañamos", reflexiona y termina con el ejemplo del pescado: "es muy rico y recomendado, pero si lo hacemos frito todo cambia".