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Mujer que recibió trasplante de rostro aparece en público

Carmen Blandin Tarleton,que fue desfigurada por su ex marido hace 6 años, revela feliz su nueva cara.

Cristián Jara

Jueves 2 de mayo de 2013

Luego de un pésimo período, la vida le vuelve a sonreír a Carmen Blandin Tarleton; una mujer estadounidense que resultó con el rostro totalmente desfigurado luego que su ex marido la atacara arrojándole lejía (blanqueador para limpiar).

Después de haber vivido "lo que algunos podrían llamar un infierno", estrenó un nuevo rostro luego de un trasplante hallando una nueva oportunidad para ser feliz. 

Carmen fue sometida en febrero a un trasplante de rostro en el Hospital Brigham and Women de Boston y habló  públicamente por primera vez en una conferencia de prensa en el hospital.

"Ahora estoy en un lugar mejor, mental y emocionalmente, de lo que podía haber imaginado hace seis años", dijo Tarleton. "Quiero compartir mi experiencia con otros para que puedan hallar esa fuerza interior para escapar a su propio dolor", agregó.

En el 2007, la mujer de 44 años y madre de dos hijos fue atacada por su entonces marido Herbert Rodgers, quien estaba celoso porque pensaba que lo engañaba con otro hombre. La policía señaló que fue golpeándola con un bate y arrojándole lejía, que contiene químicos muy potentes, en la cara.

En el 2009, Rodgers se declaró culpable de haber mutilado a Tarleton a cambio de una sentencia de prisión de por lo menos 30 años.

El hospital señaló que en el trasplante trabajaron una treintena cirujanos, anestesiólogos y enfermeras durante más de 15 horas para reemplazarle la piel, los músculos, los tendones y los nervios. La donante fue una mujer llamada Cheryl Denelli Righter, que murió de una apoplejía súbita.

Justamente la hija de la donante, Marinda, dijo a la trasplantada que se veía hermosa y agregó que estaba segura de que su madre de algún modo había escogido a Tarleton. "Ambas son madres, ambas sobrevivientes, ambas faros de luz", afirmó.

Tarleton casi no ve y leyó sus declaraciones de una tablet. Agradeció a la familia de Righter por lo que calificó de "enorme regalo" que alivió en gran medida el dolor físico, pero sobre todo el de su alma.