Una terrible experiencia fue la que sufrió una joven francesa que estuvo a punto de morir cuando quiso tinturarse el pelo con un producto que se puede encontrar en cualquier supermercado o farmacia.
Estella decidió cambiar el color de su pelo, por lo que hizo la prueba de la alergia que se indica en el envase, pero sólo por 30 minutos y no por 48 horas como se recomendaba.
Luego de aplicarse el tinte empezó a sentir una comezón en todo su cuerpo y poco a poco su cabeza se fue deformando hasta quedar completamente hinchada.
La joven que estaba documentando su cambio de look, grabó todo el angustiante proceso de su reacción alérgica.
Cuando llegó a la sala de urgencias le dijeron que había tenido una reacción alérgica al componente parafenilendiamina (PPD), el que está presente en casi todos los tintes de venta en el mercado, lo que para ella podría haber sido fatal.
Tras recuperarse, la joven decidió compartir su experiencia para alertar de los graves riesgos que puede significar estos tintes y además reclamó que no se resalte el carácter alérgeno que puede tener el compuesto, ya que la alerta la escriben en letra pequeña.