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Nobel de Química: "Sequías y huracanes serán más frecuentes"

El mexicano Mario Molina, galardonado en 1995 con el máximo premio en su especialidad, comentó junto a 24Horas los efectos del cambio climático y la mirada mundial frente al tema.

Fernando Jimenez

Miércoles 31 de julio de 2013

"Los países desarrollados deben aportar recursos a otros para solucionar el calentamiento global". Con esa clara lógica el azteca Mario Molina, premio Nobel de Química en 1995, comentó las implicancias que ya están teniendo en el planeta los efectos de la contaminación y sus derivados.

"La meta en que se han puesto de acuerdo la mayoría de los jefes de estado es aspiracional. Trata que la temperatura promedio del planeta no suba más de dos grados. El promedio es una meta sensata, no muy costosa", asegura el ingeniero químico, uno de los importantes precursores del descubrimiento del agujero de ozono antártico.

En esa línea, llamó a los países a seguir las actitudes que toman Chile y México, entre otros. "Lo que pueden hacer los países es fomentar y presionar para que sí haya este acuerdo. La medida más sencilla es que todos se pongan de acuerdo a pagar un precio", señaló abriendo la puerta a la "energía eólica" y la "energía nuclear", como los grandes aliados.

Sobre la segunda descartó que con un buen trabajo pueda traducirse en problemas como en históricos eventos anteriores. “Está muy claro que con las nuevas tecnologías los problemas preocupantes de la energía nuclear se pueden resolver. Todo eso ya se puede controlar. La sociedad debería tener esa opción”.

El mexicano se aventuró en identificar que en caso de no tomar consciencia hoy sobre los problemas climáticos, en los próximos diez años se agudizarán "sequías, inundaciones, huracanes" que serán "cada vez más frecuentes".

“La generación de electricidad  con plantas hidroeléctricas no contaminan la atmósfera, pero desplazaban habitantes y afectan a personas. Lo que tiene que hace la sociedad es analizar los problemas y tomar las decisiones más atinadas. Casi todos los problemas se pueden resolver. Una decisión amigable, es minimizar los  problemas”, agregó.