Son con sabores, tienen agua, tiran vapor y tienen de distintos colores.
Los vaporizadores electrónicos llegaron a Chile y poco a poco conquistan a jóvenes usuarios que acceden a ellos de manera recreacional o para dejar los cigarros.
Aunque buscan desplazar a los cigarrillos electrónicos y al tabaco convencional, es poca la evidencia sobre su verdadera inocuidad.
¿Son realmente inofensivos y qué opinan los consumidores chilenos? Mira el reporte de 24 Horas Central: