Las píldoras que prometen todo tipo de alivios, fortalecimientos inmunológico y hasta la eterna juventud, podrían ser contraindicadas.
Una reciente investigación reveló que las cápsulas de aceite de pescado se relacionan con altos índices en el cáncer de próstata, y muchas personas la consumen para aliviar las molestias en las articulaciones, mejorar la salud del corazón y luchar contra el deterioro mental, publica Daily Mail.
Una indagación médica concluyó que más de dos mil hombres que consumían altos índices de Omega 3, fueron 71 por ciento más propensos de desarrollar esta patología.
El médico investigador, Alan Kristal, quien dirigió el estudio en el Centro Fred Hutchinson de Investigación del Cáncer en Seattle, advirtió que "a medida que hacemos más y más de estos estudios, nos encontramos con altas dosis de suplementos que no tienen ningún efecto en aumentar el riesgo de la enfermedad que está tratando de evitar".
Muchas veces los consejos parecen contradictorios, aseveró el especialista, quien también remarcó que “tomando suplementos multivitamínicos y minerales en las dosis recomendadas es seguro”.
VITAMINA C
Desde 1750 se conocen las bondades de la Vitamina C: ayuda a curar heridas, fortalece los tejidos y mantiene las células sanas. Sin embargo, no se evidencia que tenga los mimos efectos como suplemento.
La doctora Kristal explica: “Aunque sí parece acortar la duración de los resfriados, hay poca evidencia real de que combata la enfermedad” y añade que “altas dosis recomendadas por algunos partidarios de la medicina alternativa pueden hacer más daño que bien”.
Un estudio de 2002 mostró que la dosis de 1 g de vitamina C y vitamina E casi triplicó el riesgo de muerte prematura entre las mujeres posmenopáusicas en un año.
VITAMINA E
Se encuentra en las nueces, los gérmenes, el trigo y los aceites y es esencial para las células sanas, asevera el Departamento de Salud de Inglaterra y los adultos n ecesitan entre 3mg y 4mg por día.
Los estudios han demostrado que los alimentos ricos en vitamina E pueden proteger contra las enfermedades del corazón. Sin embargo, hay poca evidencia de que las píldoras de vitamina E surtan el mismo efecto y añade que incluso pueden provocar daño.
Durante en un estudio en el año 2005 se reveló que Vitamina E en exceso aumenta las probabilidades de insuficiencia cardíaca en un 13 por ciento.
VITAMINA B
En 2011, investigadores de Estados Unidos en Cleveland Clinic descubrieron que los hombres que consumieron Vitamina B en alta concentración, tenían un 17 por ciento más probabilidades de desarrollar cáncer de próstata que los hombres que no tomaron el suplemento.
CALCIO
El calcio se toma a menudo por las personas de mediana edad y mayores para proteger sus huesos. También hay evidencia de que puede prevenir la recurrencia de los pólipos intestinales que podrían convertirse en cáncer.
Sin embargo, los suplementos de calcio pueden aumentar el riesgo de enfermedades del corazón en los hombres, según un estudio realizado en febrero por el Instituto Nacional del Cáncer de EE.UU.
SELENIO
El selenio es un oligoelemento que se encuentra en pescados y mariscos, carne y granos. Es esencial en pequeñas dosis y la deficiencia de selenio está ligada a la decadencia mental, problemas del sistema inmunológico y la muerte prematura.
Pero aunque se recomienda comúnmente para ayudar a prevenir enfermedades del corazón, el exceso puede ser perjudicial, pues se vincula a la Diabetes tipo 2, argumenta la revista Cochrane Library.
BETACAROTENO
El betacaroteno es un antioxidante natural que se consume para prevenir el cáncer. Es de pigmento amarillo y naranja. El cuerpo lo convierte en vitamina A, que es necesario para la buena visión, piel sana y un sistema inmune fuerte. Sin embargo, el abuso de su dosis puede ser dañina.
En 1994, los investigadores encontraron que los fumadores que tomaron regularmente una gran dosis de 20 mg de betacaroteno al día, tenían un ocho por ciento más de probabilidades de morir de cáncer de pulmón que las personas que no tomaron el suplemento.
Además de todo esto, el betacaroteno también puede dar a la piel blanca un tinte anaranjado, y provocar malestar.