Las enfermedades cardiovasculares suelen advertir a quienes las padecen con síntomas previos, por lo tanto es de suma importancia saber reconocerlos para mantener las precauciones necesarias y tomar acciones a tiempo.
El portal Eldiario.es entregó una lista de las nueve señales que podrían indicar problemas, especialmente detectables por nosotros mismos, según especialistas.
1. Dolor en el pecho tras esfuerzos: Podríamos encontrarnos ante una angina de pecho estable si el dolor irradia desde el pecho a los brazos, la garganta o la mandíbula y dura entre cuatro y quince minutos, sobre todo después de realizar ejercicio físico o tener emociones fuertes.
2. Sensación de fatiga con los esfuerzos: Si un hecho como subir cuatro o cinco tramos de escaleras nos deja ahogados y extenuados y nos cuesta bastante recuperarnos, puede que sea necesario visitar al cardiólogo.
3. Palpitaciones: Si tenemos una sensación incómoda en el pecho y nos notamos el latido cardiaco, deberíamos acudir al especialista, ya que en condiciones normales no deberíamos notar cambios en el ritmo. Asimismo, si tenemos palpitaciones sin estar haciendo ejercicio, podríamos tener arritmia.
4. Mareos: Si sufrimos mareos cuando realizamos esfuerzos moderados, pueden ser síntoma de una mala circulación que no permite que la sangre fluya bien por el sistema en situaciones de metabolismo acelerado, probablemente por mal funcionamiento de corazón. También se podría deber a una diabetes no diagnosticada.
5. Síncope: Una eventual pérdida de conocimiento sin motivo aparente puede deberse a problemas cardíacos, principalmente porque en un momento dado el bombeo del corazón es menor del que precisa el esfuerzo y se produce una bajada puntual de la tensión y la oxigenación.
6. Retención de líquidos: La hinchazón evidente de las piernas sería uno de los síntomas más claros de que nuestro sistema circulatorio y sobre todo nuestro corazón pierde fuerza para impulsar el riego sanguíneo venciendo las fuerzas gravitacionales.
7. Disfunción eréctil: Se estima que dos de cada tres hombres con hipertensión arterial tienen disfunción eréctil y alrededor del 40% de ellos padecen lesiones coronarias. Sin embargo, no siempre disfunción eréctil y problemas cardíacos van de la mano.
8. Aumento de la frecuencia urinaria: Si el corazón no funciona como es debido, bombeará menos sangre de la debida y como consecuencia se acumulará líquido en el sistema, como ya se ha explicado en el apartado de la retención de líquidos. Este líquido retenido finalmente irá a parar a la vejiga para ser expulsado. Esto ocurre principalmente en la noche.
9. Accidente cardiovascular reciente familiar: El que un miembro directo de nuestra familia (hermanos o padres) haya tenido un accidente cardiovascular precoz aumenta el riesgo de que nosotros lo suframos, pues indica problemas que se transmiten en la herencia genética. Se considera precoz en hombres por debajo de los 55 años y en mujeres por debajo de los 65 años.