Un estudio desarrollado por la University College y la Queen Mary University de Londres descubrió que las personas poseen mayor sensibilidad de la que se piensa en sus manos. Algunos expertos han descrito el fenómeno como el surgimiento de un posible 'séptimo sentido'.
De acuerdo a la investigación, los participantes fueron capaces de detectar objetos sin la necesidad de tocarlos tras una serie de pruebas. Una capacidad que los expertos han comenzado a denominar como un 'tacto remoto'.
Durante la investigación, los participantes debían deslizar sus dedos por una caja de arena con el objetivo de detectar la presencia de un cubo, pero sin tocarlo. Un 70% de las personas lograron percibir los microdesplazamientos del objeto.
El fenómeno se asemeja al sistema de alimentación que utilizan diferentes aves marinas, como el correlimo y el chorlito, quienes para detectar presas se percatan de variaciones mínimas en la presión de la orilla del mar.
El descubrimiento ha abierto nuevas puertas de estudio en el sentido perceptivo de los humanos y, sin duda, redefine los límites de nuestro sentido del tacto.