Con presencia en más de 16 países, My Robot School combina robótica, programación y contenidos educativos adaptados a cada etapa del desarrollo infantil, despertando el pensamiento lógico, la creatividad y el trabajo en equipo desde temprana edad. Su arribo a Chile se concretó gracias a la franquicia desarrollada por la empresa en Brasil, que busca replicar el modelo educativo en América Latina.
La escuela ofrece cuatro cursos
Firstbot, donde niños y niñas desde los 5 años tienen su primer acercamiento a la robótica mediante piezas gruesas y programación intuitiva a través de cartas de comando, que estimulan el desarrollo lógico y motriz.
Onebot, que se imparte desde los 8 años, combina contenidos educacionales con piezas más finas y programación por bloques estructurados con lenguaje en Arduino, lo que hace que se aprenda de forma divertida y desafiante al mismo tiempo.
Techbot, en que niños y niñas desde los 12 años llevan a cabo montajes de proyectos con programación en Scratch, lo que simplifica la lógica computacional, integrando conceptos de mecánica y electricidad.
Autobot, curso avanzado, también para niños y niñas desde los 12 años, que explora soluciones de automatización con programación Arduino y componentes electrónicos, enfocado en tecnología IoT.
“Queremos ayudar a los niños y niñas a desarrollar resiliencia, perseverancia, paciencia y destrezas, que son muy importantes para las carreras del futuro”, afirma Constanza Zalaquett, directora de My Robot School Chile.
“No se trata solo de aprender robótica y programación, sino de estar capacitados para un mundo en constante evolución, donde la tecnología es protagonista. Queremos ser un aporte en la educación de los niños y niñas de hoy, quienes serán los líderes del mañana, con habilidades que les permitan enfrentar los constantes desafíos que se presentan en la vida”, agregó.
Zalaquett resalta que la robótica educativa no solo fortalece habilidades cognitivas fundamentales, sino que también mejora el rendimiento académico y enseñan a los niños y niñas a perseverar. “Abre oportunidades, logrando esto a través del aprendizaje activo y la resolución de problemas del mundo real”, explica.
La escuela ya proyecta abrir nuevas sucursales en distintas comunas y regiones, además de ofrecer talleres para colegios municipales y fundaciones, ampliando el acceso a esta experiencia transformadora.
Si quieres saber más sobre esta revolución educativa, puedes visitar su sede, ubicada en Camino El Alba 9500, local 1, Las Condes.