Hay personas que, a pesar de los infortunios que puedan tener en la vida, logran rescatar lo bueno y aprender de los procesos.
Este fue el caso de Alan Crowley, un joven que registró toda la evolución que sufrió su rostro tras someterse a una cirugía plástica. Alan fue atacado por un hombre borracho quien intentó asaltarlo, y durante el ataque, cortó su cara con una botella, provocándole una gran herida.
El joven, en lugar de lamentarse demasiado, quiso pasar su tiempo de cuidados capturando día tras día la evolución de sus heridas, hasta llegar al punto en que se le puede ver recuperado casi en un cien por ciento.
Revisa el registro en el siguiente video:
Imagen: reproducción / YouTube