La desaparición de María Ignacia González, concejala de Villa Alegre, continúa generando preocupación mientras surgen nuevos antecedentes sobre su caso relacionados a una denuncia que había hecho la autoridad ante Contraloría, por una compra realizada por el municipio.
Su familia sostiene que su desaparición podría estar relacionada con su rol fiscalizador dentro del municipio. Entre las situaciones que habría observado con preocupación, se menciona la compra de un terreno destinado a la construcción de un Cesfam, cuyo valor habría sido cuestionado por la concejala debido a una supuesta diferencia significativa entre su tasación original y el monto finalmente pagado.
"Es una denuncia que ella realizó el año pasado, con el anterior alcalde, que es Pablo Fuentes, por una compra de un terreno. No podría recordar bien los montos, pero supongamos que ese terreno estaba avaluado en $20 millones y luego lo compraron por $100 millones", relató Javiera Gallegos en Mucho Gusto.
Se estima que esta situación habría sido motivo de denuncia ante la Contraloría, además de otras presentaciones realizadas en la PDI de Linares, instancias en las que la concejala buscaba esclarecer presuntas irregularidades vinculadas a la administración comunal.
Concejala desaparecida habría recibido amenazas de muerte
El terreno en cuestión, según relataron vecinos del sector, pertenecía al propietario de una discoteca ubicada frente al predio y actualmente se encuentra abandonado, aunque ya es parte del patrimonio municipal.
En este contexto, también se han mencionado posibles amenazas de muerte recibidas por la concejala, las cuales no habrían sido formalizadas en denuncias ante Carabineros o la PDI.
La investigación sigue en curso mientras se intensifican los esfuerzos para esclarecer el paradero de María Ignacia González y determinar eventuales responsabilidades.
La autoridad comunal fue vista por última vez durante la madrugada del 15 de junio, cuando regresaba a su vivienda luego de reunirse con una pareja de amigos y una prima.