El Gobierno destacó la firma del acuerdo con gremios de la Mesa del Sector Público (MSP) y las organizaciones afiliadas a la CUT por el reajuste salarial anual. Sin embargo, el artículo 14 que apunta a rigidizar las desvinculaciones ha generado rechazo en el Partido Republicano perteneciente al presidente electo, José Antonio Kast.
Cabe señalar que parte del acuerdo considera un reajuste gradual de remuneraciones de 3,4% de carácter general y de 5% en el caso de remuneraciones mínimas y bonos para trabajadores de menores ingresos.
En detalle, el artículo 14 señala lo siguiente: "se incorporará una norma que dispone que la no renovación de contratas o su renovación en condiciones distintas en la subsecretarías, servicios públicos dependientes de los ministerios o que se relacionen con el Presidente de la República a través de ellos (…) se realizará únicamente a través de un acto administrativo fundado, con hechos y fundamentos de derecho, sustentado en criterios objetivos y acreditables, sin que baste la mera referencia formal a necesidades del servicio sin respaldo fáctico ni específico".
Ante esto, el presidente del Partido Republicano, expresó a La Segunda que, "si el Gobierno sigue el camino del amarre, estaría dinamitando nuestra relación presente y futura y no creo le convenga eso".
Asimismo dijo que, "el lunes tuvimos una muy buena reunión que puso el foco en el futuro de Chile, genuinamente vimos a un Presidente en ejercicio y a sus ministros preocupados de colaborar al máximo con la nueva administración, ahora, lo que vemos camuflado en el proyecto de reajuste, es una señal de alerta muy delicada, sobre una posible intención de romper códigos que son fundamentales. Si esta se traduce también en acelerar nombramientos u otras definiciones que en rigor le corresponderían al nuevo Gobierno, se configuraría un escenario que nadie quiere".
Directamente, al reajuste mencionó que, "más allá del daño objetivo que le estarían generando a las finanzas públicas en el momento de mayor déficit fiscal de los últimos años, la pregunta es si es justo o no otorgar un reajuste a quienes en promedio ya están muy por sobre el resto de los trabajadores del país, en concreto, el doble de lo que ganan los trabajadores de las PYMES".
"Es difícil de explicarle a las miles de familias chilenas que viven con sueldos muy inferiores y a quienes se encuentran desempleados, que el Estado destine plata que no tiene a subir sueldos de quienes ya están por sobre el resto", cerró.