"Importante evidencia" logró incautar personal de Carabineros tras iniciar las diligencias en la Congregación Hijas de San José, lugar donde varias religiosas fueron víctimas de un violento asalto.
De acuerdo con los antecedentes policiales, el crimen ocurrió durante la madrugada de este sábado 27 de enero, cuando dos extranjeros ingresaron a las dependencias del convento, ubicado en calle Esperanza del barrio Yungay, en la comuna de Santiago.
"Los hechos se enmarcan durante la madrugada del 27 de enero, momento en el cual las víctimas detectan la presencia de dos sujetos, aparentemente de nacionalidad extranjera, quienes provistos de armas cortopunzantes y de fuego las intimidan con la finalidad de generar la sustracción de dinero y especies", confirmó el teniente Oscar Valdés.
La versión de las monjas da cuentas de que los delincuentes retuvieron a dos hermanas durante varias horas y que incluso amenazaron con violarlas. Tras ello, los individuos escaparon con un millón de pesos en especies y dinero en efectivo.
"A raíz del trabajo policial se ha logrado incautar importante evidencia con el propósito de generar la investigación en conjunto con la Fiscalía Local Centro Norte", indicó el teniente.
"Estuvimos una hora amenazadas con cuchillos"
La Madre Rosa Elena, una de las afectadas, relató que la Congregación ha sido víctima de la delincuencia en varias ocasiones.
"Aquí funciona la casa general de la Congregación y también están las hermanas postradas, nosotras vivimos prácticamente con hermanas mayores (...) el mes pasado ya habíamos sido asaltadas. Han siso muchas veces, pero estas dos últimas veces han sido como más repetitivas y violentas", expresó en conversación con el matinal Buenos Días a Todos de TVN.
"Esta vez fueron muy violentos, entraron por la parte más alta del convento y lo que critico es que no podemos seguir así, es imposible. La ciudadanía está sufriendo, uno se encuentra encerradas en sus propias casas y no es normal que sigamos encerrándonos y que tengamos que poner electricidad hasta el techo", añadió la religiosa.
La Madre Rosa Elena aseguró que esa madrugada "estuvimos una hora con cuchillos en nuestros cuerpos, tuve que negociar nuestar propia libertad y nuestra propia vida. Ellos nos amenazaron que si nosotras gritábamos nos iban a violar y que les entregáramos la plata".