Marzo vuelve a empeñarse en despertarnos de nuestro placentero sueño y bajarnos a la realidad, a veces, casi con un tirón de orejas. Se nos acaban las vacaciones, regresamos a las oficinas y colegios y el verano da sus últimos coletazos. Pero además, numerosos pagos extras llaman a la puerta de nuestra casa, sin importarles que acabemos de aterrizar del merecido descanso anual, donde nos hemos permitido algún que otro lujo.

Debiera ser, por tanto, el mes odiado; el que concentra el mayor endeudamiento del año, incrementándose en un 25%, según apuntan desde Defensa Integral. Llegan los gastos de la vuelta al colegio; las contribuciones, cuya primera cuota se paga ahora, y el permiso de circulación, que acarrea pagos adicionales, poniéndole la guinda a la torta.

GASTOS DEL AUTO

Los automovilistas sentirán todo el peso de su vehículo sobre su espalda. Y no se sorprendan si la carga es mayor de la esperada, porque los gastos del auto se duplican este mes.

Para que no se les atraganten estos pesos, el gerente de Asuntos Públicos de Automóvil Club de Chile, Alberto Escobar,  aconseja elaborar un presupuesto mensual que tenga en cuenta las sorpresas que esconde el permiso de circulación. Para obtenerlo hay que reunir otros requisitos:

1. Pagar las multas correspondientes, para lo que hay que revisar el registro de sanciones. “Hay más de cinco millones de multas impagas”, advierte Escobar, refiriéndose a datos del Registro Civil. (Revisa aquí si tienes multas de circulación)

2. Obtener el Seguro Obligatorio de Accidentes Personales (SOAP).

3. Tener la revisión técnica vigente. Según Alberto Escobar, “entre el 28% y el 32% de los automóviles no la tiene al día” y es una práctica “muy recomendable”, especialmente para los que “recorrieron más de 400 kilómetros durante sus vacaciones o anduvieron por caminos de tierra”.

El 80% de los conductores tramita el permiso de circulación en los últimos cinco días de marzo, antes de que se cumpla la fecha límite. Teniendo en cuenta que “el parque es de tres millones de autos”, señala Escobar, la espera está servida.

VUELTA AL COLEGIO

Si además de auto, tiene hijos, apriétese más el cinturón. Llegan las matrículas y la compra de uniformes y material escolar. Según estimaciones de la Cámara de Comercio de Santiago, $130.000 del presupuesto familiar de este mes corresponderán a la partida de educación.

Pero este monto puede aumentar o disminuir dependiendo del lugar en el que compremos. Según un estudio del Sernac, se pueden encontrar más de un 220% de diferencia entre los precios de los materiales escolares.

La mayor variación se localizó en los cuadernos universitarios, la plasticina, las témperas y los lápices de colores. Desde el Servicio Nacional del Consumidor recordaron la importancia de cotizar antes de abrir el monedero y reiteró que el centro educativo no puede exigir marcas.

CÓMO AFRONTAR

En plena cuenta atrás para introducirnos de lleno en ese pozo negro de gastos que supone marzo, los expertos brindan algunos consejos para ayudarnos con la calculadora.

“Lo ideal es recurrir al ahorro y no tirar de financiamiento en un 100%”, recomienda el abogado de Defensa Integral, Mario Espinosa.  Pero teniendo en cuenta que acabamos de pasar por la Navidad y las vacaciones, “no siempre es posible”, reconoce. Aconseja entonces:

- Comprar en 3 o 6 cuotas a precio contado.

- Usar las tarjetas bancarias en lugar de las de las casas comerciales, pues las tasas de interés de los bancos son inferiores.

- Apoyarse en créditos de consumo, para lo que es importante cotizar la mejor opción. En este sentido, hay que tener en cuenta la Carga Anual Equivalente (CAE), a menor porcentaje más barato es el crédito; y considerar el monto total del crédito, incluido intereses, por los que me endeudé.

- Evitar los avances en efectivo de la tarjeta de crédito, dado el alto interés.

“Los sectores C2 y C3 son los más afectados durante este mes”, reconoce Espinosa, quien recuerda que “no se debe destinar más de un 25% de nuestros ingresos mensuales a pagar créditos y no me puedo endeudar en más de 10 veces a mi ingreso mensual”.

Frase que deberíamos pegar en el refrigerador, para recordarnos que la luz al final del túnel puede estar más lejos del final del mes. Morder la manzana y entrar en una espiral de deudas puede convertirse en una pesadilla peor que la llegada del temible 1 de marzo.