Click acá para ir directamente al contenido

"La ciudadanía reconoce un liderazgo de unidad y cohesión": El legado que dejó Isabel II tras sus 70 años de reinado

La reina permaneció en el trono por 70 años y 214 días, superando de esta manera a su tatarabuela, la reina Victoria, quien reinó durante 63 años, 7 meses y 2 días.

24horas.cl

Sábado 10 de septiembre de 2022

"El Reino Unido, la Commonwealth y todo el mundo está conmovido por la partida de la reina Isabel II”. Estas fueron las palabras de Vicente Alti Hochstetter, máster en Relaciones Internacionales de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), quien abordó el legado que dejó la monarca tras sus 70 años de reinado.

Específicamente, la reina permaneció en el trono por 70 años y 214 días, superando de esta manera a su tatarabuela, la reina Victoria, quien reinó durante 63 años, 7 meses y 2 días (desde el 20 de junio de 1837 hasta su muerte el 22 de enero de 1901).

El legado más importante, según Vicente Alti, es la profunda entrega que demostró Isabel II a su cargo, además de otros aspectos relevantes, tales como su liderazgo, con el que proporcionó unidad en los ciudadanos.

“Durante 70 años, la ciudadanía reconoce un liderazgo de unidad y cohesión, pero sobre todo un concepto que ha sido bastante repetido, el sentido del deber”, comentó el profesional en conversación con 24Horas.cl.

“Isabel II estuvo entregada por completo a la responsabilidad a la que se obligó voluntariamente, lo que convierte al rescate de la virtud como su más importante legado vital”, complementó Alti Hochstetter, quien actualmente se encuentra cursando un máster de Políticas Públicas de London School of Economics (LSE).

Por su parte, Valeria Navarro-Rosenblatt, académica de la Escuela de Historia de la Universidad Diego Portales (UDP), enfatizó que "el legado principal de la reina ha sido un periodo de estabilidad frente a importantes cambios en el sistema internacional".

Además, precisó que "su reinado fue marcado por el paso a la modernidad tecnológica: incluye desde la primera transmisión en vivo de una coronación, así como de distintos momentos relevantes de su periodo, como la coronación de Charles como Principe de Gales en 1969, el matrimonio del príncipe en 1981 y también momentos trágicos como el quiebre entre la princesa Diana y Carlos, y luego el funeral real de la princesa".

"Luego hay toda una nueva imagen de la reina, vinculada con su cercanía al pueblo inglés, donde los últimos actos televisivos que incluyeron a la reina fueron la participación en la inauguración de los juegos Olimpicos de Londres 2012, el video con Paddington para celebrar su jubileo de platino en junio de 2022, y también en momentos complejos como el discurso dado al Reino Unido al inicio de la pandemia del COVID", añadió Valeria Navarro-Rosenblatt. 

La académica agregó que "la modernización de su reinado pasó por hacer más cercana la monarquía y a las personas que pertenecen a ella. Esto se realizó cuando se abrieron las puertas a aspectos de la vida cotidana de la realeza, y al mostrar la preocupación de los distintos grupos desfavorecidos. Se observa en la apertura de las fundaciones a temas complejos como salud, pobreza, educación, los cuales se han integrado a las actividades de caridad tradicionales de la realeza". 

“La reina Isabel II fue la argamasa de la sociedad británica”

Tras el fallecimiento de la monarca, la primera ministra del Reino Unido, Liz Truss, aseguró en un punto de prensa televisado que “la reina Isabel II fue la roca sobre la que se construyó la Gran Bretaña moderna”.

Al respecto, Vicente Alti Hochstetter comentó que “la modernidad tiende a privilegiar la horizontalidad de las relaciones y la espontaneidad de los afectos, dejando a la tradición, a la solemnidad y a los ritos como algo añejo que debe descartarse”.

En este sentido, afirmó que los dichos de la autoridad “fijan su valoración en los verdaderos frutos que entregó la monarca: cohesión social”.

“De alguna forma, la reina Isabel II fue la argamasa de la sociedad británica, logrando que las diferencias políticas, raciales y culturales se mantuviesen armónicamente unidas bajo el resguardo y dirección de la monarquía. Sin duda, la corona supone un espacio simbólico donde el Reino Unido se puede desarrollar en calma”, explicó.

En tanto, la académica de la Escuela de Historia de la UDP, Valeria Navarro-Rosenblatt, indicó que "es interesante cómo lo presenta Liz Truss, porque de cierta forma reduce la historia de la monarquía a la vida de la reina Elizabeth II, siendo que esta lleva una larga trayectoria de cerca de 1000 años".

"Además si consideramos la época 'moderna' como a partir de la revolución industrial, tenemos que hubo figuras muy relevantes incluyendo a la reina Victoria y el propio padre de la reina Elizabeth II, Jorge VI, quien asumió el cargo sin haberlo previsto dada la renuncia de su hermana Eduardo VIII, y principalmente el saber dirigir a un país en medio de las transformaciones sociales y políticas que tuvo Reino Unido en el siglo XIX", dijo. 

"Así que, si bien creo que es una linda metáfora la de que fue la roca sobre la cual se construyeron los pilares del Reino Unido actual, diría que sería más como una mesa, en que una de las cuatro patas es la reina Elizabeth II. Otra de las patas sería la reina Victoria, las redes de conexión familiar que caracterizaron a la sucesión de la reina Victoria, en particular en el periodo de la Primera guerra mundial", concluyó.