24 Horas conversó con Jonathan Leiva, un chileno que llegó junto a sus amigos a Jamaica para vacacionar y que, producto del huracán Melissa, ha quedado a la deriva en el hotel cumpliendo los protocolos correspondientes ante la emergencia.
Cabe mencionar que el primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, declaró este martes el país como "zona catastrófica", tras el impacto del huracán Melissa de categoría 5 que disminuyó a 4, horas después de tocar tierra en Westmoreland, localidad ubicada en el suroeste.
De acuerdo a los datos proporcionados por la Compañía de Servicios Públicos de Jamaica (JPS, en sus siglas en inglés), más de 530.000 clientes, alrededor del 77 %, se encuentran sin servicio eléctrico en el país.
"Obviamente, hubo una sensación de preocupación, que es primera vez que vamos a vivir un huracán y de la magnitud que se acercó a la isla. Se entregaron comida y agua y una serie de protocolos a seguir, el protocolo que tenemos es estar encerrado en la habitación, tuvimos que bloquear el fuerte ventanas con los muebles", comentó Jonathan Leiva.
De igual manera, ha relatado cómo ha sido vivir el huracán en primera persona: "Nos encontramos aquí en el baño del hotel, tenemos todas nuestras cosas personales, ya que nos dijeron que es la zona más segura, solo escuchamos mucho ruido, escuchamos vientos de 300 kilómetros por hora", agregó.
Las autoridades jamaicanas informaron de que Melissa provocó daños en seis hospitales y dejó carreteras inundadas, postes de luz y árboles caídos, según datos preliminares.
Al menos nueve personas han muerto hasta el momento a causa de los vientos y lluvias asociados a Melissa en su paso por el Caribe, tres de ellos en Jamaica, otros tres en Haití, dos en Panamá y uno en República Dominicana.