El fiscal de Cauquenes, Juan Pablo Pereira, comenzó una serie de interrogatorios respecto a las presuntas falsificaciones en la autopsia practicada a Hernán Canales, el hombre que murió tras ser atropellado por el hijo del senador Carlos Larraín, Martín Larraín Hurtado.
De acuerdo al diario The Clinic, el persecutor viajó en completa reserva a Santiago y eligió la Fiscalía de Ñuñoa para realizar las diligencias.
Este lunes fue el turno del perito de la familia de Canales, el legista Luis Ravanal, quien declinó comentar la diligencia de la que fue objeto.
Para este martes los interrogatorios seguirán y será el turno de la doctora Vivian Bustos, quien elaboró el informe donde se deslegitimaba el reporte del doctor del Servicio Médico Legal (SML), Mario Peña y Lillo (ACÁ DETALLES), que terminó renunciando al organismo forense.
Según The Clinic, también prestaría declaración la ex doctora del SML Carmen Cerda, perito contratada por la defensa de Martín Larraín.
El 18 de septiembre de este año, el automóvil manejado por Martín Larraín atropelló a Hernán Canales cuando transitaba a la altura de Curanipe, en la Región del Maule. Tras esto, se dio a la fuga, lo que impidió practicar la alcoholemia de rigor. Actualmente se encuentra formalizado por cuasidelito de homicidio.
Larraín iba con dos acompañantes, Sebastián Edwards y Sofía Gaete, quienes fueron imputados tras obstruir la investigación luego que concurrieron a la comisaría y mintieran al decir que el accidente fue protagonizado por una camioneta doble cabina y no el jeep Toyota 4x4.
Los antecedentes que se recaben en estas dligencias, más el informe de la doctora Bustos, serán fundamentales para esclarecer si Canales pudo sobrevivir si hubiese recibido ayuda médica, tesis que busca comprobar la parte querellante, representada por Gonzalo Bulnes.
De comprobarse ello, Larraín Hurtado arriesga ser formalizado por "homicidio involuntario".
Foto: archivo Agencia Uno.