La aprobación de importantes proyectos en el Congreso, antes del receso legislativo, era uno de los objetivos que durante los últimos días se ha visto alterado.
Las dificultades para lograr acuerdos al interior de la Nueva Mayoría ha impedido la votación de iniciativas fundamentales como la reforma laboral.
Para la oposición, el retraso en los proyectos ha sido algo positivo, ya que habían criticado tener que legislar sin el tiempo necesario para debatir, mirada compartida por el diputado de la UDI, Patricio Melero, quien en entrevista con Canal 24Horas indicó que "el Gobierno pretende en 23 horas lograr lo que no ha hecho en 23 meses".
Melero también se refirió a las dificultades que implica la rápida aprobación de importantes normativas y señaló que "se está reiterando un error que ya cometió el Gobierno en la reforma tributaria el año 2014, que se aprobó sin mayor profundidad y sin evaluar todo los efectos que esa reforma tenía".
Según el parlamentario "muchas de estas leyes van a salir sin el diálogo y el debate necesario, sin la profundidad y sin medir mucho los efectos que después hay que andar corrigiendo".
En cuanto a la reforma laboral, que fue retrasada para marzo, Melero indicó que "el problema de la reforma no es de tiempo, si no que de su contenido y de una reforma que no se avoca bien a los cambios que el mundo del trabajo está teniendo".
En cuanto a la Ley de Partidos Políticos, su visión fue más positiva destacando que "las penalidades que se establecen a quienes vulneren las nuevas normas de funcionamiento son adecuadas, se mantiene en los casos más graves la destitución".
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