Este miércoles, el "doodle" de Google decidió homenajear al elefante Ahmed, quien es considerado como uno de los elefantes más conocidos del mundo.
LEE TAMBIÉN
- Google dedica 'doodle' a Marlene Ahrens, primera chilena en ganar una medalla olímpica
- Clorindo Testa: 3 principales obras del arquitecto homenajeado por Google
- Dr. Victor Chang, el cirujano pionero en trasplantes de corazón que homenajea Google
- 115° aniversario del nacimiento de Cartola: por qué Google le dedicó su doodle
También llamado "El Rey de Marsabit", el elefante Ahmed ha trascendido por ser uno de los animales con los colmillos más largos y pesados de África. Su importancia fue tal que, hasta el día de hoy, es el único elefante de la historia protegido por decreto presidencial.
Su nombre se hizo popular entre la década del '60 y '70, años en los que, incluso, fue objeto de diferentes proyectos televisivos. Te contamos más del elefante Ahmed en esta nota:
La historia del elefante Ahmed
El elefante Ahmed nació en 1919 en los bosques del monte Marsabit, Kenia. Poco se sabe de su vida temprana, ya que se hizo conocido en los '60 tras ser descubierto por excursionistas en las montañas del norte de Kenia.
Fueron tales observadores quienes afirmaron que los colmillos del elefante Ahmed eran tan grandes que raspaban el suelo, una leyenda se extendió por toda Kenia.
A razón de sus extraordinarios colmillos, el elefante Ahmed de Marsabit fue, y sigue siendo, el elefante más famoso que jamás haya pisado el continente africano.
Elefante Ahmed: protegido por decreto presidencial
En 1970, su fama llegó a tal punto que Ahmed se convirtió en objeto diferentes proyectos televisivos, como una serie de ABC y un documental.
Su inmensa popularidad llevó a que se realizaran campañas para proteger al elefante Ahmed de los cazadores furtivos. Se le enviaron cartas al primer presidente de Kenia, Mzee Jomo Kenyatta, quien puso al animal bajo su protección mediante un decreto presidencial. El único con este título en la historia.
El elefante Ahmed, quien vivió en la Reserva Nacional Marsabit, fue vigilado por dos guardias de seguridad de día y noche para preservarle la vida.
Después de que Ahmed muriera por causas naturales a los 55 años, Kenia celebró su legado. El presidente Kenyatta ordenó a los taxidermistas que preservaran a Ahmed para las generaciones futuras en el Museo Nacional de Nairobi, lugar en el que se puede ver en la actualidad.
