El telescopio ATLAS (Asteroid Terrestrial-impact Last Alert System), financiado por la NASA y ubicado en Río Hurtado, Región de Coquimbo, fue el responsable de captar, el pasado 1 de julio, las primeras señales de este objeto viajero. Según los astrónomos, proviene de la dirección de la constelación de Sagitario y actualmente se encuentra a unos 670 millones de kilómetros del Sol (equivalentes a unas 4,5 unidades astronómicas).
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Aunque su nombre técnico inicial fue A11pl3Z, hoy el cometa ha sido oficialmente bautizado como 3I/ATLAS, convirtiéndose en el tercer objeto conocido que llega a nuestro sistema solar desde el espacio interestelar, después de los célebres ‘Oumuamua en 2017 y el cometa 2I/Borisov en 2019.
“Se estima que el cometa se desplaza a unos 60 km/s en una órbita hiperbólica, lo que confirma su origen interestelar”, explica NASA.
¿Cuándo estará más cerca del Sol?
3I/ATLAS alcanzará su punto más cercano al Sol, conocido como perihelio, alrededor del 30 de octubre, cuando se ubique a aproximadamente 210 millones de kilómetros de nuestra estrella, justo dentro de la órbita de Marte. A pesar de su velocidad y trayectoria, no representa amenaza alguna para la Tierra, pues su paso más próximo será a una distancia mínima de unos 240 millones de kilómetros.
Una ventana única para la ciencia
Astrónomos de todo el mundo están ansiosos por estudiar sus características físicas y químicas, y aprovecharán cada oportunidad para observarlo antes de que se acerque demasiado al Sol y quede oculto por su intenso brillo. Se espera que el cometa sea visible con telescopios terrestres hasta septiembre y reaparezca tras su paso por detrás del Sol en diciembre.
Este hallazgo no solo es emocionante por tratarse de un objeto extranjero al sistema solar, sino porque puede ofrecer pistas únicas sobre los procesos de formación planetaria en otras estrellas. Cada nuevo visitante interestelar es, en esencia, un mensajero de otros rincones de la galaxia.
“Observar un cometa como 3I/ATLAS es asomarse a materiales que se formaron en sistemas solares lejanos. Es una oportunidad científica increíble”, destaca la NASA.
¡Atentos a los próximos meses, porque podríamos seguir descubriendo secretos del cosmos gracias a este fascinante viajero interestelar!