Un equipo de geólogos de la Universidad de Chile identificó a cuatro glaciares del Cajón del Maipo como especialmente vulnerables a fenómenos de remoción en masa. Se trata de El Morado, Loma Larga, Muñiri y Mesoncito, masas de hielo ubicadas en la cuenca del río Volcán, en la Región Metropolitana.
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Aunque no hay riesgo inminente de colapso, los investigadores recomiendan una acción preventiva desde ahora, tanto para proteger a las comunidades cercanas como para anticipar futuras decisiones de política pública.
¿Qué encontraron?
El estudio, publicado en la revista Journal of South American Earth Sciences, fue liderado por Felipe Ugalde, estudiante del Doctorado en Ciencias, mención Geología, y el académico Dr. Sergio Sepúlveda, ambos del Departamento de Geología de la U. de Chile.
Tras analizar 70 glaciares del Cajón del Maipo, los científicos detectaron signos de alta susceptibilidad en varios de ellos, con potencial para generar eventos como aluviones, vaciamientos súbitos de agua o incluso bloqueos de ríos por avance de hielo. Cuatro glaciares fueron destacados por su cercanía a poblados y su popularidad entre turistas.
“Si uno de estos glaciares colapsara repentinamente, podríamos enfrentar un escenario grave, con desplazamientos de hielo a gran velocidad hacia zonas habitadas como Baños Morales o Lo Valdés”, explica Ugalde.
Casos críticos
- Glaciar El Morado: perdió en la última década una cascada de hielo que actuaba como pilar estabilizador. Esto aumenta el riesgo de colapso y rebalse de la laguna glaciar ubicada bajo él.
- Glaciar Loma Larga: famoso por su cueva de hielo, preocupa por un posible avance súbito que podría represar un curso de agua, generando un riesgo de aluvión.
- Glaciar Muñiri: en 2022 se documentó el drenaje total de una laguna vecina en apenas tres días. La rapidez sugiere una descarga violenta.
- Glaciar Mesoncito: presenta múltiples cuerpos de agua en su superficie que podrían vaciarse repentinamente si la masa de hielo se derrite.
¿Qué significa “alta susceptibilidad”?
Los investigadores utilizaron una metodología llamada evaluación de susceptibilidad, que permite estimar la probabilidad de que ciertos eventos ocurran bajo determinadas condiciones. Entre los fenómenos analizados se encuentran:
- Vaciamientos súbitos de lagos glaciares (GLOF)
- Avalanchas de hielo
- Avances anómalos de glaciares
- Deslizamientos de glaciares por pérdida de fricción
- Lahares por interacción hielo-volcán
Más de diez glaciares del Cajón del Maipo presentan riesgo alto de sufrir al menos dos de estos criterios.
“Un colapso glaciar no es como una caída de rocas. Hablamos de millones de metros cúbicos de hielo que pueden desplazarse a gran velocidad hacia zonas pobladas”, advierte Ugalde.
Cambio climático y glaciares en movimiento
Todos los glaciares del mundo están en movimiento. Sin embargo, el cambio climático está alterando ese equilibrio milenario, volviéndolos más inestables y peligrosos. Este estudio busca generar alertas tempranas y orientar el diseño de políticas públicas preventivas.
Un ejemplo reciente es lo ocurrido en Suiza, donde una avalancha glaciar destruyó un poblado alpino. Gracias a la alerta anticipada de científicos, los servicios de emergencia evacuaron el lugar antes del colapso, evitando víctimas.
En el caso del valle del río Volcán, este tipo de investigación cobra especial relevancia, ya que se trata de una zona con alta población, actividad turística y proyectos de infraestructura, como la central hidroeléctrica Alto Maipo.
Ciencia al servicio de la comunidad
Este trabajo es un ejemplo de glaciología aplicada, y forma parte de la tesis de magíster de Felipe Ugalde, quien hoy cursa su doctorado en la misma casa de estudios, bajo la tutoría del Dr. James McPhee (Departamento de Ingeniería Civil U. de Chile).
“Estudios como este son fundamentales para anticipar desastres y proteger a las personas. No se trata de generar alarma, sino de informar y actuar con anticipación”, concluye Ugalde.