"Elegí esta la camiseta porque este campeonato sí o sí vamos a levantar la 30".
Esas fueron una de las primeras declaraciones que emitió Esteban Efraín Paredes el 13 de enero de 2014, cuando fue presentado como el nuevo refuerzo de Colo Colo de cara al Torneo de Clausura 2014. Todo lo que pasó después, ya es historia conocida.
Lo dijo y lo cumplió. El zurdo, que retornó a Macul después de dejar el club el 2009 tras obtener el título del Clausura de aquel año (último título que ganó el club hasta hoy) para salvar a los albos y despertarlos de un duradero letargo que se extendió por siete torneos y casi cinco años.
Con la obtención de la ansiada estrella número 30 conseguida ante Santiago Wanderers este domingo en un repleto estadio Monumental, el delantero chileno se termina de consolidar como el último gran ídolo del club y principal estandarte de la campaña.
No solo fue el referente del equipo durante el presente curso, sino que también fue uno de los jugadores más importantes de torneo, transformándose, junto a Patricio Rubio de Universidad de Chile, como el goleador —hasta el momento— del Clausura.
Es más, sus 11 anotaciones con la que empata junto al ariete azul en el primer lugar de anotadores es más "importante" que el de su contendor, ya que aquel registro lo consiguió en menos encuentros.
Cabe destacar que Esteban Paredes debutó recién en la tercera fecha del fútbol chileno, en la igualdad 1-1 ante Antofagasta, donde no pudo anotar, pero sí se vistió de habilitador para servirle de cabeza el primer gol de Jaime Valdés. De esta manera, el delantero posee un registro impresionante: cada vez que juega marca un gol como promedio.
Paredes fue factor principal en varios encuentros de Colo Colo a lo largo de estas 15 fechas del fútbol chileno.
Tras su debut en la fecha 3 ante Antofagasta, uno de los partidos donde brilló fue ante Deportes Iquique, donde anotó su primer tanto vistiendo nuevamente la camiseta de los albos en la goleada por 5-2.
Sin embargo, el partido ante Huachipato registró una nueva marca para Paredes, que se dio el lujo de anotar tres de los cinco goles con los que los albos superaron por 5-3 a los acereros.
Ante Unión La Calera (victoria por 5-1) también el zurdo anotó dos veces y fue el guía en otra de las victorias del equipo de Macul.
Más que anotar, en promedio, en todos los partidos que jugó y ser el referente del plantel, Esteban Paredes se transformó en una esperanza para un golpeado pueblo colocolino.
El atacante sacrificó mucho para volver al club para conseguir un título que fue esquivo por mucho tiempo. El "Salvador" Paredes vino para quedarse.