Las autoridades sanitarias del condado de Coconino, en el norte de Arizona, confirmaron este viernes la muerte de un residente a causa de peste neumónica, una grave infección pulmonar provocada por la bacteria Yersinia pestis. Es el primer fallecimiento por esta enfermedad registrado en la zona desde 2007.
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Patrice Horstman, presidenta de la Junta de Supervisores del condado, envió sus condolencias a la familia:
“Nuestros pensamientos están con la familia y amigos de la persona fallecida. Por respeto a la familia, no se entregará más información sobre el caso”, indicó Horstman en un comunicado.
Bajo riesgo de transmisión
Las autoridades locales no especificaron dónde la persona pudo haberse contagiado. Sin embargo, insistieron en que el riesgo de transmisión a la población en general es muy bajo. De hecho, el último caso de transmisión entre humanos en Estados Unidos se registró en 1924.
En promedio, se reportan unos siete casos de peste en humanos al año en Estados Unidos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
¿Qué es la peste neumónica?
La peste neumónica es la forma más grave de la enfermedad, ya que afecta directamente los pulmones y puede transmitirse de persona a persona a través de gotículas respiratorias si no se trata a tiempo.
Existen distintas formas de peste, siendo la peste bubónica la más común, causada por la picadura de pulgas infectadas. Sus síntomas suelen aparecer entre uno y siete días después de la exposición y pueden incluir fiebre alta, escalofríos, dolor de cabeza intenso, dolores musculares, náuseas y la inflamación de los ganglios linfáticos, conocidos como bubones.
Contexto histórico y global
La peste, también conocida como la Muerte Negra, provocó la muerte de hasta 50 millones de personas en Europa durante el siglo XIV. Aunque hoy en día es poco frecuente y puede tratarse eficazmente con antibióticos, sigue siendo una enfermedad de vigilancia sanitaria en varios países.
Actualmente, la República Democrática del Congo, Madagascar y Perú presentan la mayor incidencia de peste bubónica endémica, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Recomendaciones para prevenir el contagio
Para reducir el riesgo de contagio, las autoridades sanitarias recomiendan:
- Usar repelentes de insectos con DEET para evitar picaduras de pulgas.
- Evitar el contacto con animales muertos o tejidos infectados.
- No acercarse a personas sintomáticas ni a lugares con brotes recientes.
Aunque la peste pueda parecer cosa del pasado, los expertos subrayan la importancia de la vigilancia y la detección temprana para prevenir casos graves o brotes más amplios.